El fenómeno de los servicios programáticos irrumpe de lleno en el entorno publicitario y eso es algo que preocupa muy mucho a los anunciantes y publicistas. Son muchos los que consideran que toda técnica que favorezca a generar un mayor volumen de trabajo publicitario ahorrando tiempo, es algo que beneficiará y a su vez, perjudicará al campo creativo. Otro clima de debate en el que nos sumergimos para dar rienda suelta al negocio del marketing y la publicidad.
Sabemos que se trata de un sector que varía mucho en función del país, en el caso de EE.UU estamos hablando de un mercado muy “desarrollado”, pero en el caso de España algunos expertos consideran que aún nos queda un largo camino por recorrer. Cada vez más, el número de agencias en Europa que invierte en estos servicios es mayor, la mayoría de estas agencias están empujando mucho para transmitir más presupuestos a la parte programática porque ven que tienen muchas ventajas.
Estudio AOL
Es cierto que el fenómeno de la publicidad programática está alentando las nuevas formas de creatividad e ingenio en multitud de proyectos publicitarios y eso es sin duda ‘el talón de Aquiles’ para muchos ‘marketeros’ que a día de hoy, y según un estudio realizado por AOL a 136 ejecutivos de medios de comunicación, agencias y empresas de trading, consideran que tanto para bien como para mal, el objetivo de la publicidad es seguir prosperando, descubriendo nuevos servicios y propuestas en las que todos puedan avanzar, aunque eso signifique que haya determinadas limitaciones contrapuestas.
El estudio nos muestra las distintas visiones que tienen los profesionales que se dedican al sector publicitario y en el que un 65% de ellos sostienen que la publicidad programática se traduce para ellos en más tiempo libre que pueden invertir en otros campos como el diseño de estrategias, gestión con el cliente o el del targeting.
Por otra parte, un 57% de las personas que emplean estos servicios constatan negando rotundamente que la compra programática esté reemplazando el componente humano que siempre ha habido en la publicidad.
Como todo fenómeno que se introduce en nuestras fronteras publicitarias, la compra programática ha entrado dando un giro de 360º hacia aquellos contenidos que se venían realizando y que actualmente está generando contenidos de calidad en los medios de comunicación, donde el cliente puede obtener una publicidad acorde a sus intereses, aportando un valor clave.
Un servicio ‘goloso’ para el sector publicitario
El papel de las agencias es determinante ya que si ellas adaptan la compra programática como un factor positivo con el que beneficiarse, al final éste tipo de actividades estarán en el punto de mira de todas las agencias ya no sólo a nivel nacional sino también a nivel internacional. Es un servicio ‘goloso’ para el mundo publicitario que viene para quedarse, y que captará la atención de agencias y clientes por los beneficios que aportará en lo que respecta a la calidad, a una mayor transparencia y a un crecimiento en su inversión.
No se trata de etiquetar como amiga o enemiga el efecto que tiene la compra programática sino de darle un papel ‘secundario’ en el que todos puedan aplicarla acorde a sus preferencias profesionales, y que vayan viendo por ellos mismos como se actúa con éste servicio.